Hay gente que nació para caminar y otra que nació para abrir caminos. Maickel Melamed nació para hacer ambas cosas y también inspirar a los seres humanos a emprender su propio andar por la vida. A pesar de todos los diagnósticos, desde el momento de su nacimiento Maickel se empeñó en salir adelante y perseguir sus sueños. Cuando conoces su historia entiendes que Maickel es un vehículo de algo más grande. ¿Qué cosa? Adéntrate en estas páginas y lo descubrirás. Más que una autobiografía o unas memorias, este libro es una invitación a conocer al ser humano detrás de las hazañas y las metas. Es una ventana para asomarse y comprender. También para aprender e inspirarse. Porque es posible. Nada es tan grande como para no intentarlo. Ahí tienes la historia de Maickel.
Tenía mucho tiempo con ganas de leer algún libro de Maickel Melamed, coach motivacional mejor conocido como atleta venezolano, y este me lo regalo mi hermana hace años. Pero fue quedando entre los pendientes y siempre había algo que me apartaba, no estaba segura de lo que conseguiría en sus páginas y si me iba a gustar o no, ya que nunca he sido muy lectora de libros de este tipo. Pero creo que al final el destino, suerte, quien sea, sabe que todo tiene un momento justo y no había mejor momento para mí para leerlo que ahora.
‘Si lo sueñas, haz que pase’ es un libro estilo auto biografía, en donde Maickel nos cuenta como ha sido su vida desde el principio y que decisiones fue tomando en el camino para ser quien es hoy. Hay partes muy duras y sentimentales, pero otras muy divertidas. En algunas ocasiones me saco sonrisas, y muchas muchas veces me pude ver relacionada con lo que él atraveso, sus dudas y sus deseos.
La idea de contarnos su historia es para convencernos que todos podemos cumplir nuestros sueños. Me gustó mucho sentir como si era realmente su voz la que me hablaba, y ver como sus sueños fueron cambiando, transformándose, hasta lograr lo que él quería.
Se puede decir que ‘Si lo sueñas, haz que pase’ es una auto biografía motivacional. Maickel Melamed definitivamente tiene el don de la palabra y lo que más disfrute de él es que es una persona realista, pero soñadora. No intento en ningún momento endulzar los momentos duros, reconocía sus limitaciones, pero nunca paro de soñar y saco las fuerzas para ser la persona que quería ser.
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